- Los apadrinamientos en los que participa la Red Acampa forman parte de las acciones de AI con motivo del 73 aniversario, el 10 de diciembre, de la Declaración Universal de Derechos Humanos que ponen de relieve casos concretos de personas en distintos lugares del mundo cuyos derechos están siendo abusados
- Janna Yihad es una joven de solo 15 años, acosada por denunciar la violencia de Israel contra los habitantes de los territorios palestinos ocupados y Bernardo Caal es un activista indígena encarcelado en Guatemala por su oposición a la creación de centrales hidroeléctricas en el río sagrado de su comunidad. Además de estas dos personas, la lista de apadrinados por distintos colectivos en Galicia incluye también al nigeriano Imoleayo Michael, encerrado en una celda subterránea por protestar contra la violencia policial; la mexicana Wendy Galarza, herida de bala cuando protestaba por la violencia contra las mujeres; Mohamed Baker (Egipto), encerrado por defender la libertad y la periodista china Zhang Zhan, encarcelada por informar de la COVID-19
La Red Acampa por Paz y el Derecho a Refugio se suma a las acciones de Amnistía Internacional (AI) para conmemorar el 73 aniversario, el próximo 10 de diciembre, de la Declaración Universal de Derechos Humanos. Lo hace apadrinando a la joven activista palestina, de solo 15 años, Janna Jihad, acosada por enfrentar y denunciar la violencia de Israel contra su pueblo en los territorios ocupados y el líder indígena guatemalteco, Bernardo Caal, en prisión por oponerse a la instalación de una empresa hidroeléctrica en el río sagrado de su comunidad. La organización internacional analiza el cumplimiento de los mandatos de la Declaración, tres cuartos de siglo después de su aprobación, focalizando en situaciones concretas, en casos de personas de diferentes lugares del mundo, como son las dos propuestas por Acampa, cuyos Derechos Humanos están siendo vulnerados. Además de dar visibilidad a esas situaciones específicas, la campaña incluye “retos” en redes sociales para actuar a favor de esas personas y de sus causas.
En un acto de Amnistía Internacional Galicia, que se celebrará el propio 10 de diciembre en el Círculo de Artesanos de A Coruña, representantes de Acampa expondrán la situación de los dos activistas sobre los que quiere poner el foco, y describirán también el marco de vulneración de derechos y violencia en el que desarrollan su lucha. Janna Jihad y Bernardo Caal forman parte de un grupo de seis activistas, propuestos por distintos colectivos, sobre los que Amnistía Internacional focalizará su campaña. Los otros cuatro son el nigeriano Imoleayo Michael, encerrado en una celda subterránea por protestar contra la violencia policial; la mexicana Wendy Galarza, herida de bala cuando protestaba por la violencia contra las mujeres; Mohamed Baker (Egipto), encerrado por defender la libertad y la periodista china Zhang Zhan, encarcelada por informar de la COVID-19.
Desde el 29 de noviembre y hasta el acto del 10 del diciembre habrá campañas en redes sociales a favor de estas seis personas como modo de presión para cambiar la situaciones de abuso y persecución que sufren y la solución de las causas que representan. El reto “Diez días por los Derechos Humanos”, que tendrá como protagonistas a esas personas, se desarrollará en RRSS los días 29 de noviembre y 1, 2, 5, 7 y 9 de diciembre. Más información:
Janna Jihad de 15 años, vive en la Cisjordania ocupada. Cuando tenía siete años, las fuerzas armadas israelíes mataron a su tío. Janna usó el teléfono de su madre para grabar y revelar al mundo la brutalidad racista que sufre su comunidad. A los 13 años fue reconocida como una de las periodistas más jóvenes del mundo, que documentaba el trato opresivo y a menudo letal infligido por el ejército israelí a la población palestina. Bernardo Caal y su comunidad protestaron cuando una empresa autorizada por el gobierno represó su río sagrado, el Cahabón, en territorio maya q’eqchi, para construir dos centrales hidroeléctricas. Después de reiteradas acusaciones infundadas, en 2018 fue declarado culpable sin ninguna prueba y condenado a más de siete años de cárcel.