• Desde 2018, en que la red dedicó su II Encuentro Internacional Acampa por la Paz y el Derecho al Refugio a  los desplazamientos forzosos por cambio climático, se está reclamando el reconocimiento de esa categoría
  • En los próximos treinta años el número de personas desplazadas por la crisis climática puede llegar, según la ONU, a los 1.000 millones

Los mimbres están. La ONU alerta que en los próximos treinta años habrá entre 250 y 1.000 millones de personas desplazadas por motivos climáticos fuera de sus comunidades y países por no disponer de agua y otros recursos para sobrevivir. ACNUR constató que desde 2009 en adelante, cada segundo, una persona fue desplazada por un desastre ambiental, con una media de 22.5 millones de personas obligadas  a desplazarse por el Clima o por eventos relacionados con él. En diciembre del 2010 los Estados presentes en la Conferencia de Cancún adoptaron un acuerdo invitando a los gobiernos a incrementar sus acciones y medidas para mejorar la interpretación, coordinación y cooperación con respeto a los desplazamientos inducidos por el cambio climático, así como a organizar una migración y reubicación planificada, cuando corresponda, a nivel nacional, regional o internacional. En la iniciativa Nansen (entre Suiza y Noruega, octubre del 2012) se recordó a los Estados que sobre ellos recaía la responsabilidad de proteger a las poblaciones afectadas por el cambio climático o los peligros ambientales. Doce años después de que todas esas alarmas comenzasen a sonar, los pasos dados son escasos. Por eso, la Red Acampa está pendiente de reunirse en las próximas semanas con los grupos políticos con representación en el Parlamento Gallego para reclamarles su aval. Quieren que la Cámara gallega traslade al Parlamento español la exigencia del reconocimiento de la figura de Persona Refugiada por Cambio Climático en sus correspondientes leyes de migración y asilo.

Lo vimos bien a través del programa que conformó el II Encuentro Internacional Acampa por la Paz y el Derecho a Refugio celebrado en A Coruña en junio del 2018. “El crecimiento económico sin límites, sin una regulación que lo frene, desemboca en una gran tragedia para la humanidad, conduciéndonos a una situación dramática sin vuelta atrás”, recuerda el coordinador de la red, Xosé Abad. Fuegos sin control en Australia y en los Estados Unidos. El Ártico perdiendo su gélida identidad. Centroamérica inundada tras furiosos huracanes. Las más recientes tormentas de nieve que paralizaron el centro de España y dejaron por semanas paisajes propios de la Rusia central. Los fenómenos meteorológicos adversos y extremos desembocan en catástrofes naturales y obligan a las administraciones a desembolsar grandes cantidades de dinero para paliarlas. Todo eso es el resultado de la crisis climática que pocos parecen tomar en serio. Los efectos del daño infligido al planeta por los seres humanos, y su incidencia directa en los desplazamientos de millones de personas que ven como su hábitat desaparece, haciendo imposible su supervivencia, son palmarios. Para recordar las conclusiones del Encuentro Internacional sobre el tema, en este enlace se accede todo el contenido de Acampa 2018:

https:// coruna2018. redeacampa. org/ gl/programa/

Desde 2018 Acampa por la Paz reclama el reconocimiento internacional de la figura de Persona Refugiada por Cambio Climático, no contemplada siquiera por la normativa que regula el Derecho al Asilo. Ahora será el Parlamento Gallego quien debe asumir una Declaración Institucional en esa línea que pueda ser replicada en el Parlamento nacional y en las instituciones europeas.

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